Los australianos en Nueva Gales del Sur, que incluye la ciudad de Sydney, logran una hora más de recreo si están completamente vacunados.
El canal 9 News Sydney informa en su tuit de ayer que “A partir del 13 de septiembre, los residentes de Nueva Gales del Sur que estén completamente vacunados contra el COVID-19 (el virus chino) tendrán nuevas libertades.
Los residentes de los puntos calientes pueden salir de casa para una hora de recreación además de su hora de ejercicio, mientras que las personas en otras áreas pueden reunirse con otras cinco al aire libre”.
#BREAKING: From September 13, NSW residents that are fully vaccinated against COVID-19 will be given new freedoms.
— 9News Sydney (@9NewsSyd) August 26, 2021
Residents of hotspots can leave home for an hour of recreation on top of their exercise hour, while people in other areas can meet five others outdoors.#9News pic.twitter.com/exbgztAbwQ
“Nuevas libertades” dice el medio mamporrero de turno. Realmente asombrosas estas nuevas libertades, una cosa nunca vista. Gente saliendo a la calle hasta ¡¡2 horas!! y seguidas, puro libertinaje y desenfreno punk en Australia.
La primera ministra de Nueva Gales del Sur Gladys Berejiklian anunció la orgia libertaria declarando que “el hito de vacunación de seis millones alcanzado esta semana, permitiría una pequeña renovación en las libertades de los residentes con la vacuna”. Los no vacunados deberán observar desde sus hogares como sus compatriotas vacunados se entregan al vicio. Toda una bacanal de sacar a los niños a pasear por el parque o pasear de la mano hasta 2 horas. Porque son 120 minutos de recreo lo que Gladys llega a conceder a los buenos australianos: “esto se suma a la hora de ejercicio ya permitida, lo que significa que los hogares podrán visitar un parque”.
¿Qué será lo siguiente? ¿Dejar que la gente pueda abrazar a su abuelita por la calle?
El invitado en el plató de 9 News, un tal Mark, dice que “esto es la recompensa para la gente que está haciendo lo correcto”
Los que hacen colas para ser vacunados y gozar de 2 horas de permiso ya saben que el tiempo de espera para ser pinchados se resta del tiempo de recreo.
En Shepparton, un pueblo de 60 mil habitantes, la tercera parte de sus residentes están en cuarentena 14 días sin poder salir de casa, los supermercados cerrando antes porque se quedan sin existencias, no se sirve a domicilio porque están colapsadas las empresas de mensajería, y las familias sin comida o pañales son algo habitual. Pero es por el bien común. Tres personas murieron el 25 de agosto por el virus chino en Nueva Gales del Sur (8,2 millones de habitantes)
Gladys, la dictadora regional de Nueva Gales del Sur, ha dicho que cuando alcancen el 70% de vacunados y se “abra el país” los no vacunados no podrán hacer muchas actividades por el peligro que causan a los demás. Al parecer esta petarda autoritaria se debe pensar o quiere que los australianos piensen que los vacunados no contagian.
Tres meses llevan confinados en este estado australiano regido por esta arpía mentirosa llamada Gladys. Australia ha soportado unos arrestos domiciliarios de entre los más draconianos del planeta. Se ha llamado al ejército para hacer cumplir las restricciones y los toques de queda, y los críticos lo comparan con Corea del Norte.
Y lo de Corea del Norte no va muy desencaminado si tenemos en cuenta que hasta el propio gobierno comunista y dictatorial chino ha criticado las medidas que se están tomando en Australia por ser excesivamente draconianas. Uno de los medios en inglés dependiente del Partido Comunista Chino, Global Times,
“La táctica de bloqueo militar expone el doble rasero de Canberra” titula el digital comunista.
Más adelante citan a un tal Chen Hong, director de estudios australianos de la East China University, quien dice que: “A juzgar por la desesperada situación en Sydney y el refuerzo militar, Australia es consciente de que el derecho a la vida es el más importante de los derechos humanos. Para ayudar a garantizar la efectividad del cierre, la decisión de Australia de enviar personal militar a Sydney parece draconiana entre las naciones”.

Cuando los comunistas chinos te califican las medidas como draconianas es que te acabas de doctorar, cum laude, en comunismo liberticida. Parece que los chinos se congratulan de que los australianos hayan finalmente entendido que “el derecho a la vida es el más importante de los derechos humanos” y no esas chuminadas de la libertad de circulación, de expresión, de reunión o la libertad de inyectarte o no vacunas experimentales. La China comunista da la bienvenida a su “civilización” a los nuevos dictadores australianos.
Descubre por qué “HOMO CORRECTENSIS”, el libro de Freenoticias que hace que los progremonguers convulsionen:
Australia es ya una dictadura, una sociedad post democrática que aplica confinamientos domiciliarios de más de tres meses; arresta a mujeres embarazadas delante de sus hijos por promover manifestaciones desde Facebook y tiene drones sobrevolando las calles para identificar y poder arrestar a los que no lleven mascarilla.
Además las autoridades sanitarias piden que no se hable con los vecinos ni siquiera llevando mascarilla. Se trata de aislar al individuo tanto online como físicamente para que además de la vacuna, se le puedan administrar continuas dosis de relato progremonguer en línea con ese jodido Gran Reinicio. Hasta los políticos lo dicen claro “debemos aceptar que este es un Nuevo Orden Mundial” (ver artículo más abajo). No se trata de conspiranoías son ellos, los propios poíticos, los que lo dicen.
Y hay más.
No se descarta el uso de dispositivos en los tobillos para obligar a cumplir las cuarentenas (también para los vacunados, ¡qué suerte!)
La Policía del estado de Victoria puede entrar en los domicilios sin órdenes judiciales.
Se emplean helicópteros para localizar a los que acampan lejos para detenerlos in situ (solo te puedes mover hasta un máximo de 4 kilómetros de casa)
Pueblos perdidos del interior de Australia cerrados a cal y canto tras aparecer un solo caso de virus chino.
Se están estudiando leyes que permitan arrestar en sus domicilios a los que difundan ideas consideradas peligrosas (como el derecho a elegir si te quieres vacunar o criticar las medidas stalinistas de la nueva Australia del terror rojo) o se crea que pueden ser peligrosos.
Y por terminar (hay muchas más salvajadas en nombre del “bien común”) la que considero más horrible: El estado puede retirar la custodia de sus hijos a los padres que no cumplan con estas draconianas, estúpidas y absolutamente acientíficas medidas:
“Quitar a los niños” (aquí tienes el enlace a la web del estado de Australia del Sur:
COVID-19 Emergency Response (Further Measures) Amendment Bill 2020
“un oficial autorizado podrá con el fin de garantizar el cumplimiento con cualquier dirección debajo de esa sección, llevarse a un niño desde cualquier local, lugar, vehículo o embarcación a un lugar de residencia del niño o un hospital o instalación de cuarentena, según le parezca al oficial”
