YouTube ha cancelado un vídeo, publicado el pasado mes de marzo, en el que tres científicos de primerísimo nivel exponían sus visiones acerca de la idoneidad de aplicar, o no, determinadas medidas anti Covid. Censuran estos vídeos en nombre del “consenso científico”, algo que no existe.
YouTube ya elimina vídeos en donde se mencione el término “fraude electoral” refiriéndose al pucherazo descomunal que tuvo lugar en EEUU a lo largo de la noche del 3 de noviembre y la mañana del día siguiente. Ahora la censura le toca a la ciencia y a la sede de la soberanía del país donde la colosal y popular dictadura tiene su sede.
Google, esa teocracia adoradora del dios inventado de la corrección política, con su templo principal en Palo Alto, California, ha dado órdenes a su filial de vídeo, YouTube, para que machaque cualquier atisbo de disidencia. Se ve que no quieren quedarse atrás en la campaña de fumigación liberticida en la que Twitterstán, el reino feudal en el que asienta su trono un cretino llamado de Jack Dorsey, estaba tomando la delantera. No nos cabe duda que afición no les va a faltar y que el pelirrojo con aspecto de inquietante androide que señorea Facebook, Mark Zuckerberg, tampoco va a quedarse atrás en esta competición por laminar la disidencia y “purificar” el discurso en internet.
En el vídeo más recientemente eliminado por YouTube, tres científicos de primer nivel charlaban online con el gobernador de Florida Ron DeSantis sobre los distintos enfoques que se dan en Estados Unidos para combatir la epidemia de Covid. Los integrantes de esta mesa redonda, además de DeSantis, eran:
.- Jay Bhattacharya; profesor de medicina en la Universidad de Stanford e investigador asociado en la Oficina Nacional de Investigación Económica. Bhattacharya dirige el Centro de Demografía y Economía de la Salud y el Envejecimiento de la Universidad de Stanford.
.- Martin Kulldorff; profesor de medicina en la Escuela de Medicina de Harvard, bioestadístico y epidemiólogo en el Brigham and Women’s Hospital.
.- Scott William Atlas; radiólogo, profesor y jefe de neurorradiología en el Centro Médico de la Universidad de Stanford hasta 2012, comentarista político y asesor de políticas de atención médica estadounidense. Es miembro senior de la Hoover Institution de la Universidad de Stanford.
Para YouTube, un mandado de Google, decir algo que no es del gusto de la alta curia del correctismo político merece el fusilamiento digital sumarísimo. A YouTube le da igual que seas Premio Nobel de medicina que si le llevas la contraria a lo que llaman “consenso científico”, al ciber paredón que vas. La ciencia avanza gracias al debate de ideas, sin debate, sin desafío, no hay avance. Para las dictaduras digitales ese axioma está pasado de moda porque ellos siempre fusilan al amanecer a los que consideran que no están de acuerdo con algo que es una aberración científica en su mismo enunciado: el “consenso científico”
Pongamos un ejemplo de “consensos” científicos viajando al siglo XIX, podríamos encontrar ejemplos como el de Galileo versus el Papa Pablo V en el siglo XVII o el de Leonard Susskind versus Stephen Hawking en el siglo XXI, de la mano del consensuado Edison y el “peligroso” Nikola Tesla.
En 1880 el “consenso” científico era que el mejor tipo de corriente eléctrica era la corriente continua que abanderaba el famosísimo Thomas Edison y no la peligrosísima corriente alterna que postulaba un iluminado llamado Nikola Tesla. Edison ya tenía registradas más de 400 patentes industriales y contaba con el respaldo de la J P Morgan mientras que Tesla era un inmigrante serbio empleado de Edison. El consenso científico y empresarial estaban del lado de Edison, y YouTube, si hubiera existido entonces, habría cancelado los vídeos que Tesla hubiera subido defendiendo la corriente alterna.
Edison llegó incluso a patrocinar espectáculos públicos donde la gente podía ver que los animales solo quedaban aturdidos al hacer pasar a través de ellos corriente continua mientras que eran achicharrados al someterles a corriente alterna. La gente estaba aterrorizada y completamente en contra del rayo mortal del joven serbio raro y a favor de la corriente suave del héroe nacional campeón de las patentes. La Feria Mundial de Chicago de 1893 fue iluminada con corriente alterna, y es la única que se emplea en los hogares de todo el mundo. Si hubiera existido YouTube entonces lo mismo tendríamos que tener estaciones generadoras de corriente continua a cada manzana.
Consenso y Ciencia no son términos que puedan emparejarse o emplearse en una misma frase excepto para decir que en la ciencia por definición no hay consenso porque sin debate la ciencia no avanza.
Las Big Tech le han cogido el gusto a prohibir las cosas que no les encajan dentro de su relato liberticida apelando a la protección de cosas que no existen. Para proteger la fantasía de que existen infinitos géneros –algo que no existe — prohíben a los que piensan que solo hay dos géneros; para proteger los “derechos” de las ideas –algo que no tienen — prohíben y cancelan a los que critican las ideas que a ellos les molan; para proteger el derecho a no ser ofendido — un derecho que no existe — cercenan cualquier argumento que a ellos les salga de las pelotas considerar como ofensivo. Y para proteger el consenso científico entorno al Covid — no existe consenso y si lo hubiera estaría cambiando cada semana — censuran a especialistas médicos, virólogos destacados y eminencias en inmunología como es el caso que nos ocupa.
¿Qué es lo que YouTube tiene que decir sobre los motivos por los que censurar la voz de tres científicos cualificados?
Según la portavoz de Youtube, Elena Hernández:
“YouTube tiene políticas claras sobre la desinformación médica acerca del Covid-19 para respaldar la salud y la seguridad de nuestros usuarios… Eliminamos el video de AIER (American Institute of Economic Research) porque incluía contenido que contradice el consenso de las autoridades de salud locales y globales con respecto a la eficacia de las máscaras para prevenir la propagación de Covid-19″.
Menudo papelón que tiene la amiga Elena que le toca despachar como “desinformantes”, con un comunicado de corta y pega, a tres tres eminencias de la ciencia médica hablando de temas de medicina y científicos…Pero Youtube censura a científicos hablando sobre ciencia para protegerte a ti querido usuario idiota, y a ti crédula señorita, y a ti abuelo estúpido, y a mí un tonto pesado con tendencias libertarias.
Como gracias a Dios aún hay plataformas alternativas a YouTube que se arriesgan a ir al infierno de la religión de la corrección política mostrando vídeos donde tres ilustres figuras de la ciencia médica hablan de lo suyo; algo terriblemente peligroso escuchar a tres médicos hablando de medicina. Así que ahí os dejo el vídeo que podría suponeros la muerte según Google. Está en inglés y para quien no lo entienda les resumo: Los colegios deberían dar clases presenciales, llevar mascarillas en lugares abiertos no es demasiado recomendable, los cierres de los negocios no son tan buenos como nos quieren hacer creer y además dan datos comparando las cifras de contagios, tasa de mortalidad, etc. de estados que han aplicado políticas más o menos restrictivas que muestran que tener a la población bajo arresto domiciliario (lo que se llama confinamiento) no es lo más eficaz para combatir al virus.
Declaración de Great Barrington contra el confinamiento como solución.
Porque resulta que el jodido consenso al que apelan estos nuevos inquisidores quema-brujas no tiene apariencia de consenso por ninguna parte porque como ya informamos en nuestro artículo La dictadura de Pedro I «El Empalador» estos tres científicos y miles de médicos, muchos de ellos catedráticos, virólogos, microbiólogos, psiquiatras y científicos en general han firmado una declaración (que te puedes descargar en el enlace de más arriba) en la que afirman que el confinamiento lejos de ser una solución óptima es un problema. Este manifiesto está escrito incluso antes de que aparecieran las primeras vacunas con lo que hoy tiene incluso más vigor y validez.
Hasta la OMS (Os Mentimos Siempre) ha admitido que los confinamientos no son la mejor solución como ya publicamos el pasado 12 de octubre.
Freenoticias 12 de octubre de 2012
Con todo mi mayor respeto y consideración para los señoros, señoras y señores de YouTube y de su puta madre Google: ¿En dónde cojones habéis encontrado ese puto consenso del que habláis y en nombre del cual vais por ahí cortando cabezas?
En cambio YouTube no debe considerar desinformación peligrosa la afirmación que el secretario general de esa cosa mafiosa llamada ONU, António Guterres hizo en relación al Covid:
«La pandemia COVID19 está demostrando lo que todos sabemos: milenios de patriarcado han resultado en un mundo dominado por hombres con una cultura dominada por hombres que daña a todos: mujeres, hombres, niñas y niños. Este es el momento de reconstruir sociedades más igualitarias, inclusivas y resilientes
No es una broma sino algo que el capo de la ONU dijo en Twitter y publicamos un artículo al respecto: La ONU culpa al patriarcado del Covid-19. Y lo trágico es que no es un chiste, aunque lo parezca
