Buenas noticias para el terrorismo islámico: Tony Blinken vuelve. El que fuera primero asesor de seguridad (2013-2015) y más tarde vicesecretario de Estado de Obama (2015-2017), segundo de la bruja Hillary en Asuntos Exteriores, se perfila como nuevo secretario de Estado en el gabinete del demente Joe Biden.
No te puedes perder el vídeo de “Barrio Sésamo” en el que Blinken le explica a Coco lo que son los refugiados omitiendo que él, y las políticas auspiciadas por él y por su jefa Hillary Clinton, fueron los principales valedores del auge del terrorismo islámico en Europa.
Si Trump no lo remedia, que yo creo que es algo que afortunadamente aún no se puede descartar, Anthony Blinken regresará de la mano del demente Joe para continuar la política exterior que más réditos ha ofrecido al terrorismo islámico y por extensión al Islam en general.
Blinken estuvo detrás de toda la nefasta gestión de aquella cosa conocida como “Primavera Árabe” que podría traducirse por “Cambiar dictadores laicos por caos islámico”, y que condujo a un vacío de poder en países como Libia o Siria. Los niños de Libia y Siria deben a los consejos de Blinken su miseria y la de sus familias.
Blinken también se significó por su apoyo de la invasión de Irak como director de personal del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, cargo que ocupó hasta 2008. Blinken ayudó al entonces senador Joe Biden, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, a formular el apoyo de Biden a la invasión estadounidense de Irak definiendo el voto afirmativo como “un voto por una diplomacia dura”.
Donald Trump, el único presidente que no ha metido a su país en un conflicto armado desde hace 40 años (desde Jimmy Carter), es dibujado como un monstruo mientras que el demente Biden, que lleva de senador desde Nixon, que votó a favor de la guerra contra Irak y que aprobó la intervención en Libia y Siria ya como vicepresidente, es descrito como el campeón de la paz y la reconciliación.
Porque Trump sin iniciar una sola guerra ha logrado tratados de paz entre Israel y dos países musulmanes (Emiratos Árbes Unidos y Bahrein) a la vez que ha tomado la valiente y acertada decisión de trasladar su embajada en Israel a Jerusalén. ¡Todo un monstruo este Donald, capaz de ahorrar víctimas mortales estadounidenses y de patrocinar acuerdos de paz!
Había que quitar a este monstruo pacifista del Despacho Oval para volver a los buenos tiempos de Barak Hussein, Premio Nobel de la Paz, y sus acciones guerreras en favor del islamismo radical. Había que volver al acuerdo con Irán para permitir a los ayatollahs construir bombas atómicas… pero sin pasarse.
Los europeos debemos a Blinken, Obama y por supuesto a Biden todas las oleadas de refugiados que desde hace 10 años padecemos.
Solo la imbecilidad de cretinos como Blinken y su jefa Clinton es capaz de imaginar que derrocar tiranos en países como Libia o Siria es sinónimo de lograr la democracia. En estos países no existe tradición democrática alguna desde el comienzo de los tiempos. En los países islámicos las alternativas son dos: una dictadura más o menos evidente capaz de mantener atadas las pulsiones que el Corán infunde en sus vasallos (como es el caso de Arabia Saudita, Marruecos, Turquía) o Islam puro y duro.
Al alentar, armar y aplaudir a los “luchadores de la libertad” para hacer caer dictaduras los hipócritas como Blinken tan solo logran salir de la dictadura para entrar en el caos y la guerra tribal eterna porque esos luchadores por la libertad no se inspiran en las ideas liberales o socialdemócratas occidentales como pasó en países de Europa del Este, sino que su alternativa al tirano es el Islam a pensión completa.
Solo la imbecilidad de cretinos como Blinken y su jefa Clinton es capaz de imaginar que derrocar tiranos en países como Libia o Siria es sinónimo de lograr la democracia. En estos países no existe tradición democrática alguna desde el comienzo de los tiempos.
Lo que estos sofisticados cabrones como Blinken logran es crear estados fallidos donde las distintas facciones y tribus, Corán en mano, se matan en el nombre de Allah y los señores de la guerra se forran con el tráfico de personas mal llamadas refugiadas; un tráfico de personas que incluye a violadores, ladrones, y también terroristas.
Pero Blinken acude a Barrio Sésamo para contarnos a todos que los refugiados por él producidos son gente como nosotros. Igualitos. Según la Heritage Foundation:
Desde 2014 casi 1.000 personas han resultado heridas o muertas en ataques terroristas perpetrados por solicitantes de asilo o refugiados. Durante los últimos cuatro años, el 16 por ciento de las conspiraciones islamistas en Europa incluyeron solicitantes de asilo o refugiados. ISIS tiene conexiones directas con la mayoría de las tramas terroristas.
Todos son iguales que nosotros dice el nota…todos hombres, casi todos de menos de 30 años, casi cero ancianos, casi cero niños pequeños, poquísimas mujeres. Vienen los más fuertes, los que pueden lograr los 2 o 3 mil dólares, por cualquier medio, para pagar a los señores de la guerra y traficantes que han florecido gracias a cabronazos como Blinken.
Ahí le tenéis al bueno de Tony, un centrista internacionalista y de perfil intervencionista según los medios progretarios. Un perfecto hipócrita.
