Isabel Díaz Ayuso acaba de caer en la cuenta: Seis millones y medio de madrileños no podían quedar fuera de la nueva subnormalidad.
Hasta hace poco los únicos que podían pedir el DNI por la calle eran los policías,también existía el secreto médico y el derecho a la intimidad. Si pensabas que la libertad individual le importa a Ayuso mira en el espejo la cara de tonto que se te ha quedado al enterarte de sus medidas despóticas. Ayuso permite que los camareros y porteros de discoteca se queden con tu número de teléfono y de DNI y promoverá un pasaporte COVID. Con el COVID el derecho a la intimidad, ese que tienen los portadores del VIH (otro virus), desaparece y el camarero se queda con tu número de teléfono y de DNI. Estamos a un paso de que nos pongan pintura fluorescente de colores sobre los bozales para saber si hemos tenido mucho, poco o cuarto y mitad de virus.
Isabel Díaz Ayuso es al fin y al cabo una política, ergo pertenece al colectivo donde el coraje intelectual es menos abundante. Isabel tiene la cabeza mejor amueblada que la mayoría de sus colegas políticos pero no deja de ser la tuerta en el país de los ciegos.
Esta mañana la presidenta de la Comunidad de Madrid con tono y ademán de muñeca pepona enteradilla ha dictado sentencia y ha decretado que el poco sentido común que quedaba en España será fusilado mañana miércoles 30 de julio a las 12 de la noche.
Ya no va solo de obligarnos a pasear con bozal hasta por el campo, que ya es una medida de cretinos, y cretinas como tú querida Isabel, con el único propósito de tenernos humillados, sino de llevar y estar marcado con un bicho-pasaporte y de que hasta el apuntador te pueda pedir la documentación y tu número de teléfono.
Como buena política no ha sido en nada clara, ¿para qué serlo si puedes confundir un poco y luego echarte para atrás o a un lado?. Después de leer la noticia en varios medios no queda claro si la limitación de diez personas se refiere al número máximo que puede estar en una terraza o al número máximo de personas por grupo.
Tampoco deja claro si la exigencia de dejar el número de DNI y el teléfono al camarero es solo para bares de copas o para cualquier bar Manolo con 10 parroquianos habituales que se conocen desde hace 40 años.
Esta mañana la presidenta de la Comunidad de Madrid con tono y ademán de muñeca pepona enteradilla ha dictado sentencia y ha decretado que el poco sentido común que quedaba en España será fusilado mañana miércoles 30 de julio a las 12 de la noche.
En el cortijo de Ayuso ahora también el portero de la discoteca o el camarero te pueden pedir el DNI. Atufa a autoritarismo pobremente disfrazado de interés por la salud pública.
Para completar el programa goebbelsiano de Isabel, esta petrimetre de vocecita de nena ingenua que se gasta una mala leche de estibador del puerto de Algeciras, va la tía y se saca un experimento piloto, qué alegría y qué alboroto, con un pasaporte COVID para tener localizados a los que ya hayan pasado la enfermedad.
Todo este catálogo de atropellos lo ha vomitado Isabel sin despeinarse y con ese aspecto de pastorcilla que no ha roto un plato. Lo dicho, la tuerta en el país de los ciegos, pero una tuerta con estrabismo y una visión provinciana. Un día esta Isabel me pareció alguien con agallas, ahora no pasa de ser un personaje Disney.
Yo pensaba hasta hace poco que los únicos que podían pedirme el DNI por la calle eran los policías, también pensaba que existía el secreto médico y el derecho a la intimidad. Pues soy un gilipollas por pensar que existen esas libertades. Con el COVID el derecho a la intimidad, ese que tienen los portadores del VIH (otro virus), desaparece y el camarero se queda con tu número de teléfono y de DNI. Estamos a un paso de que nos pongan pintura fluorescente de colores sobre los bozales para saber si hemos tenido mucho poco o cuarto y mitad de virus.
Todo este catálogo de atropellos lo ha vomitado Isabel sin despeinarse y con ese aspecto de pastorcilla que no ha roto un plato. Lo dicho, la tuerta en el país de los ciegos, pero una tuerta con estrabismo y una visión provinciana. Un día esta Isabel me pareció alguien con agallas, ahora no pasa de ser un personaje Disney.
Enhorabuena a los camareros y camareras que podrán guardarse los números de teléfono de las macizas y macizos, espero que algo bueno y de mucho amor salga de este liberticidio perpetrado por la Dama de las Camelias de la Puerta del Sol. Isabel, estás “nominada”, puedes sentarte junto a Fernando, Salvador, Pedro y los tres Pablos.